
“La violencia y la muerte no tienen la última palabra”
La Diócesis de Culiacán, con profundo dolor, lamenta el hallazgo, hoy jueves 24 de abril, de algunos cuerpos de personas privadas de su vida en el interior de un vehículo en el estacionamiento de la Parroquia de Nuestra Señora de Guadalupe, conocida como “La Lomita”.
Este acontecimiento, además de estremecer a esta comunidad parroquial y a nuestra Iglesia diocesana, vuelve a poner de manifiesto el clima de violencia que persiste en nuestra entidad.
Como Iglesia, elevamos nuestra voz con la autoridad del Dios de la vida para clamar: ¡Basta de muerte!¡Basta de violencia!
Pedimos al Señor que toque los corazones de quienes siembran el miedo y el sufrimiento, para que se conviertan y se reconcilien con la verdad, el bien y la justicia.
Como comunidad que busca la paz, no dejemos que el miedo ni la desesperanza venzan. La muerte no tiene la última palabra: Cristo Resucitado ha vencido al mal y nos llama a ser constructores de paz.
Invitamos a todos los fieles a seguir unidos en oración por la paz, a poner en manos de la Virgen María de Guadalupe a cada habitante de nuestra ciudad, a fortalecer la esperanza en medio de la tribulación y a trabajar unidos como sociedad para sanar el tejido social herido por la violencia y la muerte.
“Felices los que trabajan por la paz, porque serán llamados hijos de Dios” (Mt 5,9).
Oficina de Prensa de la Diócesis de Culiacán